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Ambas tipos de formación conviven dentro del mercado formacional en estos momentos teniendo cada uno sus perfiles de alumnos, así como sus ventajas e inconvenientes.  Vamos a realizar una comparativa de las ventajas e inconvenientes de ambas.

Calidad de la formación

Pese a que ya hay muchas universidades de prestigio impartiendo formación online, la presencial suele tener, por lo menos hasta ahora, un mayor prestigio académico. Suele ocurrir con todo lo que procede del mundo online, ya que el bajo precio o la gratuidad, hacen que lo que hay por Internet sueles ser de menor calidad y, en este caso, de prestigio. Escuela Superior, Universidad,… suele ser de más prestigio que si se hace a través de una web de forma online.

Precios de la formación

La formación presencial es más cara que la formación online. Profesorado que tiene que acudir a las aulas y disponer de parte de su tiempo dedicado a la docencia. Causa de esto es uno de los porqués que indicamos en el apartado primero. Más cara presupone mejor calidad en la formación.

Libertad de horarios

Como indicábamos antes, el tener docentes impartiendo formación en un horario concreto supone un coste y un prestigio, no obstante condiciona al alumno a realizar la formación en un horario concreto; esto supone una ventaja al alumno de la formación online que puede realizarla cuando tenga un rato libre sin necesidad de ajustarse a un horario determinado.

Variedad de temas de formación

Si la formación presencial es la que condiciona al alumno que está residiendo alrededor del centro que la imparte, y solo puede hacer la que ahí se da, la formación online permite realizar formación de cualquier tipo en y desde cualquier lugar del mundo y cuando sea. Es clara la ventaja de la formación online, sobre todo para aquel alumno que no tiene centro cercano a su domicilio para impartirla.

Factor humano

En ese caso la ventaja que posee el contacto humano entre alumnos y profesor y entre los alumnos, la tiene la formación presencial frente a la online. Era una de las mayores pegas que se le ponía antes a la formación online, la de que mucha gente solía abandonarla por falta de estímulo de ver a más compañeros realizándola.

 

Lo cierto es que ambas formaciones ahora poseen gran calidad y amplitud de contenidos, pero el hecho en sí es que cada una posee un perfil de alumno concreto y al que se le adapta mejor uno u otro tipo de formación.

 

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