Las expectativas de la Federación Española de Empresarios de Campings (FEEC), con respecto a la ocupación durante los meses de julio y agosto son de un nivel de ocupación del 70%. Esto supone un incremento del 20% con la ocupación que hubo por ejemplo durante el verano del 2012.
Estas expectativas la colocan como la segunda forma de pernoctación escogida por los españoles para este verano por detrás de los hoteles y por delante de loa alojamientos de turismo rural.
En cuanto a cifras económicas el gasto medio por familia y día asciende a los 80 euros y la media de días en este tipo de alojamientos supera ligeramente los 5 días.
Lo que si parece es que es una forma de hacer turismo más solicitada por los españoles, ya que por segundo año consecutivo, vuelven a aumentar las reservas realizadas entre los campistas nacionales. Así, se ha pasado del 40% de años anteriores (2012 o 2013) al 60% para el verano de 2015.
Las zonas de costa pueden alcanzar un nivel de ocupación que roce el 80% ya que la playa y el buen tiempo siguen siendo un reclamo inevitable en estas épocas estivales.
En los campings de interior, por contra, Madrid, Pamplona, Logroño, Zaragoza, Valladolid o Albacete apuntan al 70% de ocupación, una cifra similar según los datos manejados por la Federación.