Las estafas online, cada día más elaboradas
Igual que ha aumentado el número de estafas desde la llegada de la crisis, también aumenta el rumor de forma más rápida de que esta o aquella estafa se está produciendo, con lo cual no es de extrañar que cada día las estafas que nos podamos encontrar sean más sofisticadas y difíciles de detectar.
También es verdad que el empleo de los nuevos medios sociales ha hecho que se aumente el campo de cultivo de candidatos a ser estafados, con lo cual a mayor número de potenciales, lo normal es que sigan realizándose este tipo de estafas ya que ‘siempre cae alguien’.
Directamente vinculadas a la crisis son las estafas unidas a falsas ofertas de trabajo. De hecho, Inteco (Instituto Nacional de Tecnologías de la Comunicación), indica que una de cada cuatro estafas que se realizan está vinculada a estas falsas ofertas. Ya existían antes de la crisis, pero el aumento del desempleo que llega a límites de larga duración con el consecuente incremento de la desesperación de los parados, ha hecho que este colectivo sea vulnerable a este tipo de estafas, algo que los ‘timadores’ tienen claro. Lo más habitual es que te indiquen que llames a un determinado número de teléfono para que te informen de las características de la oferta de trabajo, y lo que realmente haces es llamar a un número de tarificación especial que verás luego en la factura el importe que te ha supuesto.
Otra estafa que circula por la Red y se vincula a la red social Facebook, es la de ‘las tarjeta regalo de Zara. Si agradecías a esta firma en tu muro personal de esta red y compartías el mensaje con 50 amigos entrabas en el sorteo de estas tarjetas de regalo. Aquí la estafa es más difícil de percibir ya que no te supone un quebranto económico directamente (salvo que hayas puesto tu número de teléfono y lo empleen para suscribirte a un sistema de SMS Preminum). Lo que si hacías a estos estafadores era dar información personal de tus contactos que empleaban en elaborar censos y bases de datos que posteriormente eran vendidos a empresas, que es donde realmente se lucraban los estafadores.
De las más afectados ha sido la reciente de Whatsapp, ya que el tener 600 millones de usuarios esta aplicación de mensajería, incrementa el potencial de afectados por la estafa. Consistía en que recibías un mensaje de texto con “Te estoy escribiendo por WhatsApp, dime si te llegan mis mensajes” y se te ocurría contestar de forma afirmativa, aceptabas el suscribirte a un servicio de SMS Premium lo cual ya verías en la factura recibida.
Como véis, cada día más sofisticadas las estafas.