Con el frio encima muchos son los que buscan destinos a los que escaparse en un viaje de invierno y muchos, amantes de los deportes de invierno y sobre todo del esquí, buscan los lugares más exóticos y más remotos en los que poder practicar este deporte.
Como destino para un viaje de invierno en el que además poder esquiar hay un lugar perfecto si buscas toda una experiencia única. Os estamos hablando de Islandia, un lugar que por la diversidad de ofertas turísticas y sus accidentes naturales y extraordinarios paisajes, cada vez más, está comenzando a ser un destino favorito.
En Islandia existen 20 estaciones de esquí repartidas entre las zonas norte, este, Reikiavik y los Fiordos del oeste, que suman más de 72 km de pistas de todos los niveles con más de 40 remontes entre ellas.
La estación de esquí más grande del país es Hlíðarfjall, en Akureyr, al norte de Islandia y l segunda ciudad más grande del país, donde, entre otras actividades, se puede practicar esquí de fondo, snowboard y conducir motos de nieve, además de esquiar de noche. Tiene alrededor de 15 km de pistas de todos los niveles con 5 remontes y unas vistas extraordinarias al Eyjafjörður.
Las estaciones de esquí que encontramos en Islandia, por zona, son:
Este: Oddsskarð, Stafdalur,
Norte: Dalvik, Hlidarfjall Akureyri, Húsavík, Olafsfjordur, Siglufjordur, Snaefellsjokull y Tindastól
Reikiavik: Bláfjöll
Fiordos Oeste: Isafjordur
Como podéis ver la mayor concentración de estaciones de esquí se encuentra en el norte del país.