Un destino muy recomendable a la hora de decidir dónde ir en un viaje de invierno en el que además podamos practicar turismo activo y nuestros deportes de invierno favoritos como puede ser el esquí es Serbia, un lugar que nos ofrece innumerables encantos, puntos de interés y todos los requisitos para disfrutar de unas vacaciones de calidad y un esquí de calidad.
El sistema montañoso de Serbia, como el Parque Nacional Kopaonik conocido como el “techo de Serbia” y la cordillera Golija, permite que podamos encontrar pistas y lugares en los que practicar esquí con cualquier nivel de experiencia sea principiante, intermedio, avanzado o experto, junto a otras muchas actividades. Encontraremos donde practicar snowboard, parapente, monoesquí, esquí nocturno o conducir motos de nieve.
La estación de esquí más grande y conocida de Serbia es Kopaonik, que nos ofrece más de 50 km de pistas y 23 remontes. Tiene pistas para esquí nórdico, eslalon gigante, esquí de fondo, snowboard y esquí nocturno. En el sur del país, en la montaña del mismo nombre.
Stara Planina es la montaña más grande y más bella del este de Serbia y pasa casi 5 meses al año bajo la nieve lo que provoca poder practicar un esquí alpino en largas pistas. Es una de las estaciones de esquí más importantes de Serbia. En la frontera con Bulgaria, en la Reserva Natural de Babin Zub, podemos practicar entre otros esquí alpino, esquí de fondo y esquí nocturno.